Leamos un Libro
: El Padre que Educa en el
Hogar
Capítulo Tres
: Cumple con Tu Papel de
Protector
por Michael Farris
Cumple con Tu
Papel de Protector
El padre pionero conocía su papel. Tenía su rifle siempre
a la mano, sabía cómo usarlo y estaba constantemente preparado para proteger a
su esposa y a sus hijos contra cualquier agresor.
La educación en el hogar es un movimiento pionero y el
padre educador en el hogar debe estar preparado para realizar el papel
ejemplificado por el padre de aquella época. Se requiere del padre que educa en
el hogar, que defienda a su familia contra los ataques de los funcionarios de
las escuelas públicas y otros agentes de gobierno que se resisten a nuestro
avance hacia lo que ellos consideran territorio de ellos.
Yo he estado proporcionando defensa legal para familias
educadoras en el hogar desde 1983. He atendido miles de llamadas telefónicas
pidiendo ayuda, he intervenido en cientos de conflictos legales y he comparecido
en juzgados en docenas de ocasiones. Lamento tener que informar que la vasta
mayoría de mis contactos con familias que educan en el hogar han sido con
madres que educan en el hogar. Este mismo informe es el que recibo de los otros
abogados que colaboran conmigo en la Asociación para la Defensa Legal de
Educadores en el Hogar.
Cuando un inspector de educación llega a casa de una
familia, generalmente recibimos una llamada de Mamá. Si los oficiales envían
una carta con amenazas de proceso legal, normalmente nos busca Mamá. Estamos
conscientes de que Papá frecuentemente se encuentra en el trabajo durante las
horas en las que se hace necesario buscar a un abogado de HSLDA. Pero en muchas
decenas de ocasiones se ha presentado la siguiente situación: yo devuelvo una
llamada a una familia que ha solicitado asistencia legal. Aun cuando sea el
padre el que contesta el teléfono, él inmediatamente le pasa el teléfono a la
madre porque ella es la que “se está encargando de la educación en el hogar.”
La familia, por supuesto, tiene la libertad de distribuir
las responsabilidades como mejor les parezca. Y en nuestra sociedad moderna es
políticamente incorrecto representar al padre como protector y a la madre como
necesitada de protección. Pudiera ser que aquellos que eligen vivir conforme a
la filosofía moderna también decidan descartar este consejo. Sin embargo, si
una familia intenta vivir conforme al patrón bíblico, es obvio que el padre es
el responsable de proteger a su familia. No es congruente con el concepto bíblico
del marido como cabeza del hogar, que un padre imponga a su esposa el papel de
protectora legal.
Por tanto, padre cristiano, tú tienes que asumir el
liderazgo para defender a tu familia en el caso de que se presente un conflicto
legal a causa de su educación en el hogar. Cuando la madre se ve obligada a
asumir este papel por negligencia del padre, ella tiende a volverse
excesivamente temerosa y en ocasiones innecesariamente histérica. La madre
tiende a reaccionar de esta manera porque se le está imponiendo por fuerza un
deber que la Biblia le asigna al padre.
Como abogados, es frecuente que tengamos que explicar
ampliamente las posibles consecuencias de seguir cierta línea de acción. A
veces estas consecuencias potenciales son bastante severas. Pero siempre
procuramos tranquilizar a la familia, informándole que ninguna familia miembro
de HSLDA jamás ha perdido la custodia de sus hijos, ni los padres han sido
hallados culpables de negligencia y enviados a la cárcel y ninguna familia ha
recibido una orden que les prohíba seguir educando en el hogar. Una madre que
se ha visto obligada a ser la “protectora” de la familia a veces reacciona
en forma exagerada ante una explicación de las posibilidades legales. La lógica
dicta que su familia probablemente resista la tempestad legal como lo han hecho
todas las demás familias que les han precedido. La madre es más que capaz de
razonar en forma lógica. Yo nunca atribuyo la ansiedad excesiva de una madre a
alguna falta en ella misma; más bien considero que esto simplemente es una
respuesta natural cuando un padre descuida su papel como líder protector de su
familia.
Hay tres cosas que tú, como padre, necesitas hacer para
cumplir con tu papel como protector legal del programa de educación en el hogar
para tu familia: prepara un plan legal para tu escuela en casa, da los pasos
necesarios para completar los requisitos legales para la educación en el hogar,
y toma la iniciativa para resolver cualquier dificultad legal que se presente.
Veamos cada una de estas responsabilidades.
1. El padre debe tener un plan legal
para su escuela en casa
Es una realidad desafortunada, pero toda familia que educa
en el hogar debe aceptar que tienen que enfrentar los asuntos legales que
afectan a la educación en el hogar. Esto no significa que tengas nada qué
temer. Simplemente significa que debes tener un plan que satisfaga adecuadamente
las necesidades legales de tu familia. Los siguientes son los ingredientes mínimos
de un plan legal:
a. Consigue un ejemplar de la ley de educación de tu
estado.
Debes procurar conseguir un ejemplar de la ley de tu estado
o en su defecto, una explicación de dicha ley en términos laicos. Si sabes
usar una biblioteca de derecho, puedes obtener un ejemplar de la ley sobre
educación en el hogar en tu estado. En treinta y cuatro de los estados de la
Unión Americana esto sería relativamente fácil, ya que la ley es
relativamente clara y se encuentra en un mismo capítulo en los libros de
derecho. Sin embargo, en los demás estados realmente se necesita más información
que la que puede obtener fácilmente el laico. En algunos estados necesitarías
encontrar disposiciones específicas entre las leyes que conciernen a escuelas
privadas. En otros tendrías que encontrar los fallos de juzgados que han
declarado judicialmente sobre el derecho de educar en el hogar.
La manera más sencilla de obtener la información que se
requiere es escribir o llamar a la Asociación para la Defensa Legal de
Educadores en el Hogar. La HSLDA te enviará un ejemplar gratuito de un resumen
de una página de la ley de tu estado (en los EE. UU. AA.). Este resumen
contiene todas las citas legales, de tal manera que tendrías la información
necesaria en caso de que quieras investigar por ti mismo en la biblioteca de
derecho.
b. Define las convicciones espirituales de tu familia
respecto a la obediencia a la ley de tu estado.
Muchas familias cristianas han enfrentado requisitos
legales que les han hecho dudar seriamente respecto a la posibilidad de obedecer
tanto a Dios como al hombre. No decidas con ligereza que no puedes someterte a
la ley de tu estado en materia de educación en el hogar. Debes poder señalar
principios específicos en la Escritura que te impedirían obedecer un requisito
legal específico. Tampoco basta, ni legalmente ni espiritualmente, decir: “No
quiero obedecer la ley hoy porque mañana pudiera cambiar y pedirme que haga
algo que no quiero.” En Mateo 6:34 Jesús nos dice que dejemos que los afanes
de hoy basten para hoy. Y los juzgados te dirán que no puedes protegerte
constitucionalmente contra una ley razonable que está en vigor hoy sólo porque
temes que el gobierno pudiera imponer una ley desmedida mañana. Si llegaras a
la conclusión de que el gobierno actualmente te está exigiendo que hagas algo
que Dios prohíbe, entonces debes contar con protección constitucional si te
niegas a obedecer. Lamentablemente, los juzgados no suelen ser generosos en el
reconocimiento de tus derechos en tales situaciones, pero si prevaleciera el
derecho constitucional apropiado, deberías ganar.
c. Elabora un plan para las necesidades potenciales de
defensa legal para tu familia.
La HSLDA gasta entre US$750 y US$10,000 en gastos legales
externos en la defensa de nuestros casos. Esto no toma en cuenta el hecho de que
nuestros abogados de base realizan la inmensa mayoría del trabajo en casi todos
los casos. Si se incluyeran nuestros costos internos, el costo real de la
defensa sería entre US$2,000 y US$100,000. Obviamente estas últimas cantidades
se incurren sólo en los casos raros que pasan a los tribunales de apelaciones y
llegan hasta la Suprema Corte de los Estados Unidos.
Pocas familias tienen capacidad para cubrir esta clase de
gastos. La Asociación para la Defensa Legal de Educadores en el Hogar es la única
organización que te garantiza una defensa legal total. Nosotros pagamos todos
los honorarios de abogados y costos de juzgado, incluyendo honorarios de
testigos peritos, apógrafos y viáticos. La cuota de membresía es de US$100
anuales. Existen otras organizaciones que defienden a las familias que educan en
el hogar – en algunos casos en forma gratuita – pero estas organizaciones sólo
aceptan casos selectos y están limitados por la cantidad de fondos que pueden
recabar mediante técnicas de solicitación por correo.
Obviamente, yo considero que la opción más sabia es
inscribirse en HSLDA. Cuando miles de familias se unen para una defensa
colectiva, tenemos la capacidad de auxiliar a cualquier familia individual que
pudiera llegar a ser blanco de ataque por parte del sistema educativo
establecido.
2. El padre debe dar pasos para satisfacer los requisitos
legales para educar a su familia en el hogar.
Es muy importante que tengas un plan legal antes de
establecer cualquier contacto con autoridades educativas. Demasiadas familias
intentan cumplir con las leyes sobre educación en el hogar antes de elaborar un
plan, y terminan por tener problemas innecesarios. La HSLDA no otorga membresía
a ninguna familia que ya tenga problemas legales.
Si conoces las leyes de tu estado y has elaborado un plan
de defensa adecuado, entonces te encuentras en una posición de ventaja para
tratar con las autoridades.
Un principio relacionado es el siguiente: no debes omitir
por completo una decisión respecto a tu situación legal. Necesitas decidir
deliberadamente si cumplirás con la ley o no, y luego aplicar de inmediato esa
decisión. Existen pocos estados—muy pocos de verdad—en las que la mejor táctica
sería simplemente esperar para observar lo que suceda. En ocasiones la mejor
decisión es no establecer contacto alguno con las autoridades. Pero esa sería
la mejor decisión únicamente en el caso de que se tome deliberadamente. Una
decisión basada sobre la negligencia nunca será la correcta.
Existen varios estados que tienen plazas absolutos para dar
aviso de la intención de instruir en el hogar. Si no tienes una justificación
bíblica para no sujetarte, debes dar puntualmente los pasos para cumplir con
esos plazos.
3. El padre debe tomar la iniciativa para resolver
cualquier dificultad legal que pudiera surgir.
No puedes ni debes esperar que tu esposa enfrente a las
autoridades de gobierno para la protección de tu escuela en casa, especialmente
si aceptas la enseñanza bíblica en el sentido de que el marido es el líder de
la familia. La interacción con las autoridades es una responsabilidad de
liderazgo y le toca claramente al padre. Tú debes hacer las llamadas telefónicas
a los funcionarios de gobierno. Tú debes firmar cualquier oficio que se envíe.
(También es aceptable que padre y madre firmen ambos estos oficios.) Nosotros
tuvimos que defender un caso en el que sólo la madre era acusada de delito
simplemente porque ella había sido la única firmante de una carta dirigida al
distrito escolar.
También debes ser tú el principal contacto con la HSLDA o
con algún otro asesor legal. Tu esposa puede ser tu portavoz si tu situación
laboral es un auténtico impedimento para tratar con los abogados durante el día.
Pero ella percibirá la diferencia si sólo la has dejado con la totalidad de la
responsabilidad. Tú debes ser el líder en este esfuerzo en equipo. Ni debes
abandonar a tu esposa ni tampoco dejar de consultar con ella para asegurar que
ambos están de acuerdo en cada paso importante de una confrontación legal. Yo
quisiera motivarte a usar de liderazgo amable y esfuerzo en equipo. No seas ni
mandilón ni tirano.
Otras Maneras de Proteger a Tu Familia
Dificultades con los familiares. Su educación en el hogar
pudiera sufrir ataques de otras fuentes además de las autoridades de gobierno.
Tu esposa y tus hijos pudieran ser ridiculizados por sus familiares. Tristemente
un número elevado de familias que educan en el hogar reporta conflictos serios
con sus parientes.
Si algunos de sus parientes se oponen a que eduquen en el
hogar, ellos deben descubrir bien pronto que cualquier discusión sobre el
asunto deben entablarla contigo o por lo menos incluirte a ti. Nunca es correcto
que los parientes "acosen" a los hijos a causa de una decisión tomada
por sus padres. Si te llegaras a enterar de que esto suceda, debes informar
inmediatamente (y muy cortésmente) al pariente que tu hijo no es el responsable
de esa decisión. Lo eres TÚ, y cualquier pregunta o comentario lo deben
dirigir a ti.
Si fueran los parientes de tu esposa los que ocasionan
dificultades, ella generalmente deseará estar presente en cualquier discusión
seria. Eso no tiene nada de malo. Pero recomiendo fuertemente que tú también
estés allí y asumas amablemente la responsabilidad final y expliques tu decisión.
Protege el horario de tu familia.
La gente intentará aprovecharse de tu familia debido a que
educan en el hogar. Madres de tu iglesia que tienen hijos preescolares buscarán
dejarlos en tu casa mientras ellas van de compras. Conforme tus hijos crezcan
descubrirás (como lo descubrimos nosotros) que muchas personas intentarán
conseguir que tus hijos mayores les sirvan de niñeros durante el horario de
estudio. Debes ayudar a tu esposa y a tus hijos a establecer reglas para la
familia para evitar esas interrupciones. Obviamente desearás ser flexible con
las reglas para ayudar con las verdaderas emergencias, pero debes calificar una
emergencia según la norma que aplicarías para justificar una salida de tu
trabajo.
Otro gran interruptor de la instrucción de la familia en
el hogar es el teléfono. Compren una contestadora, asegúrense de que funcione
y úsenla. |