Entre Mamás - Octubre 2000
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Entre Mamás – Octubre 2000
Por Pamela Richardson

Fue un placer estar con todas las madres en la Quinta Conferencia Anual de El Hogar Educador.  Verlas a todas ustedes que son “Formadoras de Destinos” fue un gran aliento para mi.

Todas estamos de acuerdo en que Cristo es el fundamento de todo nuestro entrenamiento.  El carácter piadoso es una parte muy importante de nuestro entrenamiento.  Pero – no podemos ignorar esas destrezas para la vida que son necesarias para servir en esta vida.  Necesitamos ser diligentes en todos los aspectos de nuestro entrenamiento.  Aunque lo académico no es nuestra primera, o principal prioridad – es importante y necesario.  Debemos tener cuidado de no desatender esta área de la instrucción de nuestros hijos.

Como pioneras en el movimiento de educación en el hogar (eso es lo que son), están abriendo el paso para quienes seguirán detrás de ustedes.  Ustedes también son una rareza y atraerán la atención de otros que preguntarán, “¿Qué estás haciendo y por qué lo estás haciendo?” Estarán observando tus éxitos y tus fracasos.

Nuestros hijos deben recibir buena instrucción en destrezas de lectura y matemáticas.  Deben aprender a ser buenos comunicadores – tanto en forma escrita como oral.  Somos parte de una comunidad más grande que sólo nuestra familia.  Si somos negligentes en la enseñanza de lo básico en lo académico, manchamos no sólo el nombre de nuestra familia, sino también el de la educación en el hogar en general.  He oído frecuentemente de otras personas, cuando les digo que educo a mis hijos en el hogar, “Ah, yo conozco a otra persona que también tiene a sus hijos en la casa.  Se levantan tarde, no tienen rutina, no hacen trabajo de la escuela con regularidad y están muy atrasados en lo académico” – y la lista continúa.  En muchas ocasiones, también conocen a otros que son fieles en la enseñanza completa del niño ‑ espiritual, física y mental.  Pero es frecuente que recuerden más a los padres irresponsables.  Si somos descuidados en nuestra instrucción, no estamos dañando sólo a nuestros hijos, sino también a nuestros compañeros educadores en el hogar.  Los muchos son juzgados por el fracaso de los pocos.

Esforcémonos juntas para ser halladas fieles en cada aspecto de este importante ministerio de formar los destinos de nuestros hijos.

Un buen caldo para un día frío.

Sopa de Pollo con Elotes

1 pollo en piezas                                                                          ½ cucharada de chile colorado en polvo

4 papas grandes                                                                                    1 cebolla picada

2 tazas de elote enlatado o congelado                                         1 diente de ajo, picado

Sal y pimienta al gusto                                                                        ¼ de taza de harina

2 cucharadas de consomé de pollo                                                    ½ taza de mantequilla

Cuece y deshuesa el pollo.  Quita el pellejo y pon aparte las piezas de pollo.  Cuece las papas y el elote en el caldo del pollo con sal, pimienta, consomé y el chile.  Fríe la cebolla y el ajo en mantequilla y agrega harina hasta hacer una pasta suave.  Agrégala al caldo de pollo cuando las verduras estén blandas, aprox.  20 minutos.  Menea bien hasta que espese.  Agrégale el pollo y menea.  Sirve con pan caliente - ¡delicioso!