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La Última Palabra - Abril 1997
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La Última Palabra - Abril 1997 Estimados , El otro día Pam y yo estábamos hablando con unos amigos en Monterrey acerca de la educación en el hogar. Mis pensamientos se volvieron a un grupo de gente en los Estados Unidos; sus familias viven una vida muy sencilla. Ellos hacen su propia ropa, obtienen su agua de los pozos, cosechan su propio alimento y en general crían hijos obedientes, dignos de confianza y trabajadores. Yo había leído un artículo acerca de una misionera a Nueva Guinea quien había sido criada en esta secta. Me sorprendió cuando mi amiga me dijo que estos misioneros no estaban con este grupo ahora sino que estaban en otro. Al continuar nuestra conversación, me enteré de que no todos los miembros de esta secta eran creyentes como yo lo había pensado. Mi pregunta fue, ¿Cómo es que alguien querría vivir en esa forma si no fuera creyente? Mientras pensamos en eso, la respuesta comenzó a emerger — egoísmo. Así es, egoísmo. Porque como ven, el enfoque está equivocado — un deseo de vivir una vida sencilla y de criar hijos obedientes, dignos de confianza, y trabajadores no debería de ser nuestro enfoque. Nuestro enfoque debería ser el vivir una vida entregada al servicio de nuestro Señor y criar hijos que sean obedientes y trabajadores para el Señor. (II Corintios 2:9 Porque también para este fin os escribí, para tener la prueba de si vosotros sois obedientes en todo.) Si este es nuestro enfoque — nuestro objetivo primordial — entonces un beneficio adicional será un hogar feliz donde nuestros hijos sean obedientes, dignos de confianza y trabajadores. En Cristo, Mike y Pam P.D.: Por favor tomen nota de nuestra nueva dirección y teléfono al final de la hoja. |